Nuestros pensamientos tienen fuerza y poder condicionando nuestras vidas y la de aquellos que nos rodean.     La mente, nuestra mente, es semejante a una emisora de radio, según aquello que emitimos mentalmente puede ser beneficioso o perjudicar para nosotros mismos y también para las personas que nos rodean. Una persona normal emitirá siempre que este armonizada mental y espiritualmente, pensamientos puros y beneficiosos para ellos y para todo los que capten esos pensamientos, sin embargo una persona llena de celos, deseos de venganza y odio, emitirá esos pensamientos que le harán daño a quienes lo emiten y a aquellos que inconscientemente los capten y  reciban, aunque estén lejos de la persona que los emitan, los pensamientos tienen mucha fuerza y pueden provocar beneficios o perjuicios. Yo estoy convencido de que esto es así y que la forma de pensar es muy importante en nuestras vidas, tener pensamientos de Paz, salud, prosperidad, alegría y bienestar, porque pensando así todos nos  beneficiamos nosotros y toda la humanidad, es un consejo de este humilde servidor de todos, vuestro hermano en Cristo Manuel.